La inflación se modera al 2,2% en agosto, lo que supone seis décimas menos que el dato registrado en julio. Se trata de la tasa más baja del IPC en el último año. En concreto, desde junio de 2023. Sin embargo, la subyacente se atasca en el 2,7%, solo una décima por debajo que el mes pasado.

Así lo publica este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE), que explica que esta bajada de la inflación se debe al descenso de los precios de los carburantes, frente a la subida de agosto del año anterior. A esto hay que añadir, “aunque en menor medida”, a la disminución de los precios de alimentación y bebidas no alcohólicas, que bajan más que en el mismo mes de 2023.

La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) disminuye una décima, hasta el 2,7%.